Ciudad del Vaticano – La audiencia concedida esta mañana, 17 de noviembre, por el Papa León XIV a la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha durado aproximadamente una hora. El encuentro, solicitado por los obispos pocos días después de la elección del Pontífice el 8 de mayo y confirmado en septiembre, ha representado el primer momento oficial de diálogo entre el nuevo Papa y la cúpula del episcopado español.
Anuncio del Evangelio e iniciación cristiana
Al término del coloquio, el arzobispo de Valladolid y presidente de la CEE, Mons. Luis Argüello, explicó que con el Papa se analizaron “los distintos procesos que está atravesando la Iglesia española”. Entre los temas abordados, señaló el prelado: “el fuerte deseo de anunciar el Evangelio”, “los desafíos de la iniciación cristiana”, “la organización territorial de las diócesis”, la llegada de numerosos fieles provenientes de otros países, la presencia pública de los laicos; la situación de los religiosos y de las monjas de clausura, “una tradición extraordinariamente rica pero hoy marcada por un descenso numérico”. Mons. Argüello mencionó también “la realidad del clero”, que en España está viendo la incorporación de nuevos sacerdotes procedentes de Iberoamérica y África, contribuyendo a sostener diócesis cada vez más afectadas por la disminución vocacional.
El plan PRIVA y la protección de las víctimas de abusos
Una parte significativa del encuentro estuvo dedicada al trabajo emprendido por la Iglesia española, “por impulso de la Santa Sede”, en el ámbito de la prevención de los abusos, de la formación y de la reparación a las víctimas a través del llamado plan PRIVA. Se trata de un programa destinado a ofrecer una reparación integral a personas que, siendo menores o encontrándose en situaciones vulnerables, sufrieron abusos en diócesis, congregaciones religiosas u otras realidades eclesiales, en casos ya prescritos o en los que el autor haya fallecido. “El plan ha llevado a la creación de una comisión de reparación que, por lo que vemos, está acogiendo a las víctimas de un modo satisfactorio”, dijo Argüello.

España espera a León XIV
La audiencia fue ocasión para renovar la invitación al Papa a visitar España. “Salimos con la esperanza de que la visita pueda realizarse en un futuro no lejano”, declaró el presidente de la CEE, deseando que el Pontífice pueda conocer de cerca “algunas realidades vivas de nuestra Iglesia”. Argüello añadió que León XIV ha demostrado estar perfectamente informado del resurgir de un interés espiritual y religioso, particularmente entre los jóvenes, a pesar de un contexto sociológico a menudo distante de la práctica eclesial. Están aumentando, explicó, los retiros espirituales, las experiencias comunitarias más fervorosas e incluso las peticiones de bautismo de adultos. Un dato confirmado también por los obispos: este año el número de seminaristas ha crecido respecto a 2024.
Evangelizar en una sociedad postsecular
El presidente de la CEE definió estos signos alentadores como parte de una reflexión más amplia que se abordó con León XIV, dedicada a la misión de la Iglesia en una sociedad que “ya no es solo secularizada, sino probablemente postsecular”. “En esta situación surgen nuevas formas de búsqueda, entre ellas la espiritual y la del Evangelio”, precisó Argüello, subrayando que el Papa conoce muy bien la realidad española gracias a sus años como agustino y a su servicio en el Dicasterio para los Obispos. Entre los temas tratados estuvo también el Jubileo, “en particular el de los jóvenes celebrado a comienzos de agosto”. Al término de la audiencia, los obispos regalaron a León XIV una Biblia con la traducción oficial de la CEE, dos números de la revista Ecclesia dedicados al Papa y una contribución para su caridad.
Encuentro en la Tercera Logia
Durante la visita a Roma, la Comisión Ejecutiva se reunió también con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado. Un coloquio útil para “afinar las cuestiones pendientes en las relaciones entre la Iglesia y el Estado en España”, a la luz de los recientes encuentros del purpurado con el ministro de Justicia y, más recientemente, con el presidente Pedro Sánchez con ocasión de la COP30 en Brasil. La audiencia en el Vaticano confirma la atención del Papa León XIV hacia una de las Conferencias Episcopales más relevantes de Europa, hoy comprometida en una fase delicada pero también llena de signos de renovación.
d.S.P.
Silere non possum